Como bien informa el coordinador, Jaime Pintos Santiago, queremos poner en conocimiento de toda la comunidad jurídica y no jurídica la publicación de un especial monográfico sobre “Ética de la Función Pública y Transparencia”, publicado en la Revista Aletheia, Cuadernos Críticos del Derecho, Liberlex, nº 2, diciembre-2015, 304 págs. Ésta es una importante iniciativa que podríamos denominar de la sociedad civil, porque pensamos que el propio monográfico es tan necesario para nuestra sociedad como es necesario cambiar muchos de los valores en los que la misma actualmente se sustenta, en beneficio así de un mayor estado del bienestar y del progreso de las generaciones presentes y futuras.
Se trata de una iniciativa altruista llevada a cabo de manera generosa por todos los que en ella han participado, en la que con unos más que modestos medios se pretende un ambicioso objetivo, y es que las valientes prop
uestas, ideas y reflexiones que atesora este monográfico sirvan también, además de estímulo de la conciencia social, en la tarea normativa que en estos momentos se fragua y seguramente se llevará a cabo en España y puede que también en otros países, como por ejemplo los que corresponden a alguno de los autores partícipes en el monográfico, Costa Rica y Uruguay.
Por tanto, este especial monográfico sobre “Ética de la Función Pública y Transparencia” es sólo uno más de la cantidad de pasos que se han dado a lo largo del tiempo en este sentido, pero un esfuerzo más en ese camino. Por consiguiente, no pretendemos con ello cambiarlo todo, sino mostrar que otra forma de hacer las cosas es posible, que otros valores existen (amparados jurisprudencialmente como acredita el monográfico) y que necesariamente, parece que cada día más, deben ser rescatados para el bienestar y beneficio de la sociedad y los Estados en su conjunto.
La oportunidad y buena acogida del especial se encuentra asegurada en España por el actual momento legislativo y político que vivimos, y la idoneidad de su contenido viene refrendada por su lectura y por los nueve autores que lo rubricamos. Por nuestra parte hemos tenido el placer de poder colaborar en esta gran iniciativa con el Capítulo que resumimos a continuación:
Abstract del Capítulo «Transparencia municipal y derechos de las personas como base de los proyectos de Gobierno abierto y Smart City». 
El servicio público debe pivotar alrededor de las personas, no de la administración. Personas que tienen reconocidos legalmente una serie de derechos electrónicos de última generación, entre los que podría incluirse el derecho de acceso gratuito a Internet. Desde el punto de vista institucional la administración más próxima al ciudadano siempre ha sido y es el nivel de gobierno municipal. Defendemos un modelo de Ayuntamiento, de cualquier tamaño, que presta sus servicios pensado en las personas, sensorizando los inmuebles y espacios públicos y en general aprovechando la tecnología para hacer la vida más fácil; que tiene implantada la administración electrónica y sobre todo es interoperable para dar cobertura a los derechos electrónicos de los ciudadanos (y también para responder de la mejor manera posible en la atención presencial); que es legal y transparente, muy participativa, y por eso está donde está el ciudadano (en la Red, en los móviles, en las redes sociales…) a fin de ofrecerle toda la información e interactuar con él; que fomenta el ahorro de energía, la economía local y las iniciativas empresariales de futuro, es decir, las tecnológicas y sostenibles… Se trata de proyectos multidisciplinares, complejos pero factibles, con un coste de inversión más bajo de lo que parece y en todo caso subvencionable o financiable a través de la colaboración pública o privada, o público-privada, siempre con un retorno asegurado de la inversión, además de ese intangible que no se valora en dinero que es la excelencia. Mas es el ciudadano el que tiene que validar este modelo. El sistema de gobierno abierto tiene una parte políticamente estética, que es la transparencia, pero realmente esta es un medio técnico para la consecución de los más altos fines: mejora de la calidad democrática, participación ciudadana, colaboración con el resto de actores públicos y privados, promoción económica, mejora de los servicios públicos. Otros instrumentos, como la rendición de cuentas y los datos abiertos, contribuyen a los mismos fines. El futuro pasa por un gobierno abierto (transparente, participativo, colaborativo), que desarrolle una administración o servicio público inteligente (que supere la fase de administración electrónica y aún la de administración digital) para una sociedad del conocimiento (más allá de la sociedad de la información).
Monográfico sobre “Ética de la Función Pública y Transparencia” (descarga gratuita)
Nosoloaytos 
Excelente aportación a el tan necesario cambio desde dentro, gracias por compartir gratuita y abiertamente esta labor, hace más llevadero el arduo trabajo de «nadar contra corriente».