En muchas ocasiones los mejores estilistas no son los que más triunfan. ¿Quién es mejor cantante técnicamente hablando, un tenor en paro o un intérprete de reguetón de gran éxito? La propia pregunta se contesta sola. Es cierto que la pura perfección técnica no lo es todo, del mismo modo que nos atraen más las personas imperfectamente atractivas que las de belleza y rasgos perfectos. Trato de decir con esto que mi escritor preferido no es, ni remotamente, el mejor escritor del mundo: se le achaca poca construcción psicológica de los personajes, sobre todo en su primera época; ausencia de tramas sentimentales y de personajes femeninos relevantes, algo que con el tiempo corrigió; y una técnica literaria mediana a pesar del excelente manejo de la lengua y calidad de expresión… Y sin embargo sí era probablemente el de mayor imaginación, y uno de los más prolíficos… Y uno de los más inteligentes. De hecho este es su rasgo más destacado: su inteligencia era sencillamente abrumadora. Dicho lo cual, siempre es un placer redescubrir a uno de mis ídolos de juventud: Isaac Asimov.
En este sentido, Isaac Asimov, no con su calidad literaria pero sí con su racionalismo visionario, nos dejó algunas maravillosas perlas. Destacamos 10 de ellas que además son absolutamente aplicables a la moderna gestión pública:
- «La autoeducación es, estoy convencido, el único tipo de educación que existe».
- «Dudo que el ordenador llegue algún día a igualar la intuición y capacidad creativa del sobresaliente intelecto humano».
- En boca de Salvor Hardin, en su libro Fundación: «Nunca permitas que el sentido de la moral te impida hacer lo que está bien».
- «Para tener éxito, la planificación sola es insuficiente. Uno debe improvisar también.» (también de Fundación).
- «Un sutil pensamiento erróneo puede dar lugar a una indagación fructífera que revela verdades de gran valor.»
- En boca de Andrew Martin, en el cuento «El hombre bicentenario»: «Uno se alegra de resultar útil».
- «Las normas establecidas con razón y con justicia, pueden dejar de ser útiles al cambiar las circunstancias, pero al permitir que continúen vigentes por la fuerza de la inercia, entonces, no sólo es justo, sino también útil, quebrantar aquellas que nos anuncian el hecho de que son inútiles, o incluso realmente perjudiciales». (Fundación y Tierra )
- «Me parece, Golan, que el avance de la civilización no es más que un ejercicio en la limitación de la intimidad». (Los límites de la Fundación)
- «La ciencia se construye a partir de aproximaciones que gradualmente se acercan a la verdad.» (Anochecer)
- «Realmente, casi no es necesario que hagamos el bien. Lo que hace falta es que dejemos de hacer el mal, ¡caramba!»